Un sangriento hecho por partida doble sucedió en la comunidad San Miguel, en el municipio La Cruz de Río Grande en el Caribe Sur de Nicaragua.
La tragedia para la familia inició la madrugada del 30 de agosto, cuando en la noche del 29 fue asesinado el joven Ceberiano Guillén López de 19 años de edad, en la comunidad San Miguel, quien fue encontrado en un charco de sangre y con múltiples heridas ocasionadas por arma blanca (machete). El cuerpo del joven fue llevado a la casa de su padre, Don Dennis Martín López Suazo, donde se le veló.
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El crimen realizado con odio fue al extremo, ya que una de las heridas fue en el cuello del joven.
Una pesadilla
Pero la familia López no sabía que el dolor y angustia aún no llegaba a su fin.
La noche del 30 de agosto mientras Don Dennis Martín López Suazo velaba a su hijo, varios sujetos que se presumen sean los mismos que asesinaron al joven, llegaron a la vela y sin mediar palabra con machete en mano le arrebataron la vida a Don Dennis, justo al lado del ataúd donde se encontraba el cuerpo de su hijo.
Don Dennis fue trasladado de urgencia al puesto de salud en la cabecera municipal, donde fue declarado muerto por las múltiples heridas que le ocasionaron hemorragia, seguido de un shock hipovolémico falleciendo a las 7 de la noche de ese mismo día.
Según una fuente en la zona, dio a conocer que la muerte del padre e hijo viene por problemas de tierras con otra familia, algo aún no confirmado, sin embargo padre e hijo fueron sepultados.
La Policía Nacional en ese municipio realiza las investigaciones desde el hallazgo del cuerpo del joven Ceberiano y ahora se suma la muerte del papá.
De igual manera testigos en la zona y que se encontraban en la vela, indicaron que los sujetos partieron del lugar como si nada había ocurrido.