El alemán de 43 años Christian B., sospechoso de haber asesinato a la niña británica Madeleine McCann en 2007, ha pedido la excarcelación de la penitenciaría donde cumple condena por un caso relacionado con drogas.
El abogado del sospechoso ha comunicado esta decisión a la Audiencia de Kiel (norte), competente en la causa por la que cumple condena, según informaciones del diario "Bild" y medios locales de Hannover.
La pena de privación de libertad por tráfico de drogas concluye en enero de 2021 y el pasado 7 de junio cumplió ya dos tercios de la condena impuesta, lo que justificaría la petición. Tiene pendiente de confirmación otra condena, en ese caso por violación en 2005 de una estadounidense de 72 años en Portugal, contra la que ha presentado recurso.
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A Christian B. se le investiga actualmente como sospechoso del secuestro y presumiblemente asesinato de Madeleine McCann, "Maddie", la niña británica desaparecida cuando dormía en un apartamento de Praia da Luz (Portugal), mientras sus padres cenaban en un local cercano. Por entonces Christian B. vivía en esa zona de Portugal.
Agentes de la Oficina Federal de la Policía Criminal (BKA) realizaron estos días pasados un exhaustivo registro en una parcela ajardinada de Hannover en busca de pistas sobre el caso "Maddie". Las excavaciones en el solar, donde según medios locales se encontró un sótano secreto, terminaron ayer. La Fiscalía, sin embargo, no ha informado sobre resultados de la búsqueda y simplemente confirmó que el registro estaba relacionado con Christian B.
Abundantes delitos y 17 condenas
El sospechoso tiene abundantes antecedentes penales por abusos sexuales, agresiones físicas, así como robos y delitos menores, en algunos casos relacionados con su existencia pasada en Portugal, donde vivió entre 1995 y 2007. Vivía de trabajos ocasionales y también de delitos contra la propiedad en hoteles y apartamentos.
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Acumula 17 condenas por distintos delitos y supuestamente la noche en que desapareció Madeleine estaba en las cercanías de donde dormía la niña, ya que una antena captó una señal de su teléfono móvil que lo ubicaba.
Su primer juicio por un delito sexual fue en 1994, cuando tenía 17 años, en que fue condenado por abusar de un niño. El último caso relacionado con menores fue un proceso por tenencia de pornografía infantil, en 2016.
