El caribe nicaragüense, conformado por dos Regiones Autónomas, el Caribe Norte y el Caribe Sur, con una particularidad que se diferencia al resto del país es la autonomía regional promulgada y aprobada hace 32 años, es una región rica en cultura y tradición, en ellas existen 8 diferentes etnias, miskitos, sumu, mayangnas, afrodescendientes, ramas, garífunas, ulwas y mestizos, por esa particularidad las regiones autónomas son multiétnicas y pluriculturales.
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Esa multietnicidad se vio reflejado este 12 de octubre en celebración de nuestras Culturas Indígenas Nicaragüenses y Mesoamericanas, desfiles de bandas rítmicas, gastronomía típica, danzas y bailes tradicionales hicieron de este día, un día para recordar y rendir homenaje a nuestros antepasados que vivieron la desgracia bajo el dominio de imperios que solo quería robar las riquezas y desaparecer a los nativos de nuestra mesoamérica.
Nicaragua es el primer país en América Latina en implementar leyes que reconocen la autodeterminación de los pueblos originarios, es por ello que es reconocida y pasó a ser un modelo en muchos países del hemisferio como ejemplo en materia de cuestiones indígenas.
En 1987, en la primera etapa de la revolución, se aprobó el estatuto de autonomía, en 1990 se instalaron los gobiernos autónomos, posteriormente se aprueba la ley 445, ley que mandato al estado demarcar y titular los territorios indígenas y afrodescendientes, sin embargo durante los gobierno neoliberales esta ley quedo engavetada. No fue hasta en el 2007, con el retorno del Frente Sandinista de Liberación Nacional, en esta segunda etapa de la revolución, que inició el proceso de demarcación y titulación, hoy son 23 territorios demarcados y titulados.
Los avances son significativos en la restitución de los derechos de los habitantes del caribe, educación, salud, infraestructuras viales, seguridad alimentaria, son solo algunos temas que han fortalecido la calidad de vida de los caribeños.
Para los costeños la autonomía es la revolución.