La Policía de Nigeria arrestó el pasado domingo a un hombre y sus tres esposas por supuestamente mantener encadenado durante más de dos años a su hijo, de apenas 11, en un cobertizo para animales, mientras ellos mismos vivían en su casa en Birnin Kebbi, según informó el periódico The Sun Nigeria.
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Jibril Aliyu, que al ser encontrado apenas podía estar de pie y desfallecía de hambre, fue trasladado de urgencia a un hospital local para proveerle el tratamiento necesario. Se informa que el niño no tenía agua y se veía obligado a comer el forraje de los animales con los cuales convivía, así como sus propias heces, como "único medio de supervivencia".
#JusticeForJibril
The worst child abuse of our time..This is a story of a boy called Jibril Aliyu, who hails from Badariya Area of Birnin Kebbi, Kebbi State. He was chained alongside animals by his 2 stepmother for 2 years. pic.twitter.com/v0SHqn0dHF
— Manir Jega (@manirjegah) August 10, 2020
Rehabilitación al pequeño
Un hermano mayor de la víctima declaró que Aliyu sufría de epilepsia y que la familia lo encadenó para evitar que desapareciera. Dijo además que el niño solo estaba encadenado durante las horas del día, e insistió en que su padre vendió la casa y el coche para financiar su tratamiento.
He was maltreated by these same people like an animal to the extent that he was feeding on the remnant food of the animals he was tied with and even ate his faeces, until he was rescued by some Human Right Activist. pic.twitter.com/dwtBDBQbWM
— Manir Jega (@manirjegah) August 10, 2020
Este lunes, el Gobierno del estado de Kebbi se comprometió a tratar y rehabilitar totalmente a Jibrin Aliyu, mientras que la asesora del gobernador, Hajiya Zara'u Wali, calificó el incidente de "lamentable y chocante" y advirtió que los padres que cometan actos similares no serán tolerados.