Este 13 de noviembre se publicaron dramáticas imágenes grabadas por cámaras de vigilancia, que muestran el ataque con ácido realizado por Arthur Collins, de 25 años, el 17 de abril en el club nocturno Mangle de Londres.
Collins, expareja de la estrella de un 'reality show' británico conocida como Ferne McCann, roció la sustancia corrosiva dentro del local lleno de gente, informa 'The Mirror'. Las cámaras del club filmaron cómo el joven se esconde detrás de otro, lanzando el líquido hacia la gente.
Este lunes el hombre fue declarado culpable del ataque y ahora se enfrenta a una pena de prisión "sustancial". Collins admitió haber arrojado el contenido de la botella hacia los asistentes del club, pero afirmó que no sabía que se trataba de ácido.
Francia homenajea a las 130 víctimas de los atentados de noviembre de 2015
Considerado como uno de los peores ataques con ácido en el Reino Unido, dejó 22 personas heridas, la mayoría de las cuales sufrió quemaduras graves. Collins será sentenciado el 19 de diciembre.
En contexto
Repartidor podría quedar ciego tras sufrir ataque con ácido en Londres
Un repartidor de comida rápida puede quedarse ciego tras ser atacado en Londres con ácido por dos individuos que trataban de robarle la moto, confirmó hoy la Policía Metropolitana (Met).
El repartidor, de 32 años, fue agredido en la tarde de este jueves por dos varones desde una moto en el barrio de Walthamstow, en el este de la capital, según desvelaron los agentes.
Los agresores trataron de sustraer la moto de la víctima a la que arrojaron repetidamente una sustancia corrosiva a la cara, provocándole graves lesiones.
El hombre fue atendido en el lugar donde se produjo el incidente antes de ser trasladado a un hospital de la zona donde se encuentra ingresado en estado grave.
Un portavoz de la Met señaló que es probable que el hombre pierda la visión en ambos ojos.
"Esta agresión ha dejado a un hombre luchando por su vida y con terribles lesiones en los dos ojos. Un hombre inocente que realizaba su trabajo como repartidor, que podría no volver a ver nunca más", afirmó el inspector jefe, Gordon Henderson.
Ese policía instó a los ciudadanos a "aportar cualquier información que puedan tener acerca de ese delito", al tiempo que consideró "imperativo detener a los responsables".
