Don Mauricio Ramírez Torres, de 48 años, se gana la vida honradamente como obrero del volante en horas de la madrugada, después de una dura jornada retornaba a su vivienda en el barrio El Pilar; sin pensar que sería interceptado por dos amigos de lo ajeno que intentaron despojarlo de su dinero y al oponer resistencia le propinaron una pedrada en su pie izquierdo que le provocó una posible fractura.
El taxista fue asistido por paramédicos de la Dirección General de Bomberos, quienes en condición estable lo trasladaron al centro de salud de Altagracia para que fuese valorado por médicos de turno.
El hecho se registró de los semáforos del Sumen, tres cuadras arriba, una cuadra al sur. La policía del Distrito III investiga el caso.
Benedicto Balmaceda