El segundo día de negociaciones entre Irán y un grupo de seis potencias concluyó hoy sin que se haya podido cerrar un acuerdo sobre el programa nuclear iraní y continuarán mañana.
Inicialmente, estaba previsto que esta ronda de negociaciones durara sólo dos días, pero se optó por prolongarla uno más ante la clara posibilidad de acordar medidas de aplicación inmediata y a medio plazo por parte de Irán para garantizar los fines pacíficos de su programa nuclear a cambio del alivio de las sanciones económicas que le impone Occidente.
«Estamos trabajando duro» fue el único comentario que hizo el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, al retornar a su hotel al término de una reunión tripartita en la que participó con la responsable de la política Exterior de la Unión Europea, Catherine Ashton, y el ministro de Exteriores iraní, Javad Zarif.
El texto incorporaría, según fuentes diplomáticas, medidas concretas que Irán debería cumplir de forma inmediata, como detener el proceso de enriquecimiento de uranio al 20 por ciento y hacer que las reservas existentes dejen de ser utilizables.
A cambio se aliviarían las sanciones económicas contra Irán, relacionadas con el bloqueo de fondos iraníes en el exterior y con el comercio de minerales y productos petroquímicos.