Un habitante de la ciudad alemana de Homberg, en el norte del estado de Hesse, hizo estallar su vehículo delante de su propia casa ante la mirada de los policías que acudieron al lugar de los hechos después de recibir una llamada de sus vecinos, que habían denunciado una pelea familiar, informan los medios locales.
Siete personas han resultado heridas en el incidente. «No quedó nada del coche; un trozo de motor se desplazó 30 metros a causa de la onda expansiva», dijo un representante de la Policía local, Wolfgang Keller.
El hombre salió de casa a causa de un conflicto con sus familiares y regresó en su coche después de aproximadamente media hora. Al estacionarse, el suicida provocó la explosión con su vehículo que recientemente había transformado en un coche bomba.