El huracán Ana avanzaba el sábado con un rumbo que lo llevaría a más de cien millas de Hawái, aunque sus fuertes vientos e intensas lluvias provocaron alertas de inundación y atrajeron a los surfistas con grandes olas.
El centro de la poderosa tormenta se encontraba en el Pacífico unas 135 millas (217 kilómetros) al suroeste de Honolulu, y perdía velocidad en su camino al suroeste de las islas, según el Servicio Nacional Meteorológico de Estados Unidos.
Se espera que la intensidad de Ana se debilite poco a poco», indicó Chris Brenchley, del servicio meteorológico.
La advertencia por tormenta tropical seguía vigente en Oahu y Kauai, aunque se levantó en Maui, Lanai y la Gran Isla.
En Oahu, turistas y surfistas disfrutaban en la popular playa de Waikiki de las grandes olas creadas por la tormenta a primera hora de la tarde, que después dieron paso a unas aguas agitadas.
Cuando las olas son buenas, tienes que ir», dijo el surfista Emile Meder, de 23 años y que hizo tiempo para un rato de surf antes de ir a trabajar. «Cada vez que tenemos un huracán sabemos que va a ser bueno».
Estaba previsto que Ana dejara atrás la isla de Kauai el sábado por la noche, con los peores efectos de la tormenta registrados en torno a la medianoche, señaló Brenchley.