La ONU reiteró su llamamiento a la comunidad internacional para ayudar a la población de la estratégica ciudad siria de Kobani, en la frontera con Turquía, acosada por las tropas del grupo yihadista Estado Islámico (EI).
«Si no actuamos ahora, habrá una tragedia más para el pueblo sirio, y eso tendrá consecuencias para la humanidad», expresó el viernes la secretaria general adjunta para Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas, Valerie Amos.
Las informaciones que llegan de Kobani, recalcó, son «confusas, pero hablan de que en la ciudad podría quedar gente que no puede abandonarla».
«El Estado Islámico se muestra implacable con la población de las ciudades que captura. Tenemos que llegar hasta esa gente y ayudarla», insistió.
Según se informó previamente, los yihadistas se hicieron con el control de casi el 40% de Kobani.
El viernes también ocuparon el principal barrio administrativo de la localidad que aloja la mayoría de las sedes de las autoridades regionales kurdas, una comisaría de policía, una cárcel y varios puestos de control.
A día de hoy, el EI controla la totalidad de los barrios orientales de la ciudad y una zona del noreste y sureste.
Los islamistas sitiaron Kobani a mediados de septiembre, y desde entonces hay intensos combates por el control de esta urbe que provocó las muertes de más de 500 personas, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.