Si alguien tratara de «ofender» a Rusia en la ONU de alguna manera, no habría encontrado mucho apoyo en las filas del organismo mundial, afirmó el embajador ruso ante la ONU, Vitali Churkin.
Contestando a la pregunta sobre la propuesta del presidente polaco de quitarle a Rusia el derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre el asunto ucraniano, Churkin aseguró que su declaración no tiene ningún fundamento.
«Aquí, todo el mundo ha leído la Carta de la ONU, por lo que simplemente nadie va a responder a declaraciones de este tipo. Estoy seguro de que si alguien intentara de alguna manera «ofender» a Rusia en la ONU, no habría encontrado mucho apoyo. Por lo tanto, es mejor no intentarlo», dijo el representante permanente del país ante Naciones Unidas, citado por la agencia Interfax.
En el marco de la 69.ª sesión de la Asamblea General de la ONU se celebró una reunión de alto nivel sobre la cuestión del derecho de veto en el Consejo de Seguridad. Los participantes del encuentro se mostraron a favor de la antigua propuesta de que un miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU debe abstenerse voluntariamente del uso de su derecho de veto para bloquear acciones para prevenir o detener la violencia.
Por su parte, la misión diplomática rusa rechazó categóricamente la idea de cambiar las normas del uso del veto en el Consejo de Seguridad de la ONU, a pesar de que se mostró dispuesta a continuar las conversaciones sobre la reforma.
«Se deben continuar las negociaciones sobre la reforma del Consejo de Seguridad. Estamos en contra de cualquier cambio en relación con el derecho de veto», indicó en aquel entonces el diplomático ruso.
Según explicó Churkin, en el Consejo de Seguridad de la ONU se han formado dos grupos de países que tienen diferentes enfoques sobre la reforma del Consejo, pero ninguno tiene la mayoría necesaria para tomar una decisión.