El Kremlin rechazó las últimas sanciones sectoriales de Estados Unidos y la Unión Europea, a poco tiempo de haberse firmado la tregua con Ucrania el 5 de septiembre.
El Gobierno ruso tildó este domingo como «cínicas» las últimas sanciones de Occidente, sobre todo luego de los acuerdos de tregua con Ucrania alcanzados en Minsk, capital de Bielorrusia el pasado 5 de septiembre, declaró el jefe de la Administración presidencial, Serguéi Ivanov.
«Por supuesto, no nos alegran y nos causan un cierto daño pero es evidente que las sanciones causan daño también a nuestros socios, es decir, a los que las impone. Y las últimas sanciones, así llamadas sectoriales, parecen cínicas aún más», dijo Ivanov en una entrevista al periódico Rossiyskaia Gazeta.
El funcionario indicó que las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea (UE) fueron impuestas en el momento cuando apareció esperanza a la paz, cuando las partes firmaron los acuerdos en Minsk y la tregua entró en vigor.
Ivanov recalcó que las sanciones occidentales deben fomentar el desarrollo de la industria rusa y la cooperación con los terceros países.