La policía de Nueva Zelanda ha detenido a Michael Harris, un propietario de hotel de 56 años, acusado de drogar a turistas a los que filmaba mientras abusaba de ellos, informa el portal ‘Daily News’.
En concreto, Harris está acusado de agredir sexualmente a 16 turistas varones que se alojaron en su Mainstreet Lodge, en Kaitaia, en los últimos dos años y medio. Según la policía, el hotelero filmó «grabaciones visuales íntimas» con los hombres, en su mayoría turistas extranjeros de edades comprendidas entre 18 y 25 años.
Según Rhys Johnson, detective sargento mayor, es muy poco probable que estas víctimas supieran que les había pasado algo, aunque, opina, «pueden tener sospechas».