Un comunicado que emitió el equipo ucraniano FC Shakhtar Donetsk, manifiesta que «Como resultado de los bombardeos, hay numerosos daños y perjuicios de la fachada noroeste del estadio, comunicaciones, equipamiento y edificio independiente de energía, No hay victimas entre el personal del estadio».
Según las primeras informaciones, no ha habido heridos, pero sí destrozos en la fachada noroeste, que se ha derrumbado parcialmente.
Además, ha quedado inutilizado el sistema energético de la imponente instalación deportiva, víctima también del contencioso armado entre las tropas gubernamentales de Ucrania y las fuerzas federalistas.
Tras estas explosiones, el equipo (el Shakhtar Donetsk) tendrá que pasar la temporada jugando en las ciudades de Kiev y Lviv cuando le corresponda la condición de localía.