Investigadores brasileños encontraron el esqueleto fosilizado de una tortuga de agua dulce de 125 millones de años en la región noreste del país, informaron hoy fuentes oficiales.
Los restos de la tortuga, bautizada como «Atolchelys lepida» por sus descubridores, fue encontrada en una roca en el municipio de Sao Miguel dos Campos, en el estado de Alagoas.
El fósil mantiene intactos el cráneo, la mandíbula y la carcaza del animal, entre otros elementos.
Los investigadores calculan que la tortuga tenía unos 20 centímetros y probablemente vivía en un lago, con una cantidad baja de oxígeno.
El esqueleto forma parte de la familia de las Pleudoria, uno de los dos grandes grupos en los que se dividen las tortugas actuales.
RIO DE JANEIRO, (Xinhua)