90 personas han sido detenidas durante los disturbios en una carretera en las afueras de la ciudad brasileña de São Paolo.
Los manifestantes, que según fuentes policiales eran al menos 500, quemaron dos camiones y cinco autobuses en una protesta por la muerte de un adolescente en un tiroteo con la Policía.
La Policía informa que se registraron saqueos, en los que algunos de sus participantes portaban armas de fuego y realizaron disparos. Un transeúnte recibió un balazo y fue hospitalizado, según informó la Policía Militar de São Paolo.
Los incendios, mostrados en directo por varias cadenas de televisión, bloquearon durante cerca de dos horas los dos sentidos de la carretera que conecta São Paulo y Belo Horizonte, capital del estado de Minas Gerais.
La Policía Federal de Carreteras informó que desbloqueó la vía sobre las 22:40 GMT permitiendo de nuevo el tráfico de vehículos.
Los manifestantes también montaron barricadas en la favela Vila Medeiros, donde murió el pasado domingo un joven de 17 años durante la represión policial de otra protesta.
Las autoridades aseguran que al agente se le escapó accidentalmente un disparo de su arma reglamentaria, alcanzando al joven que transitaba por el lugar de forma absolutamente fortuita.
