La Fiscalía federal del distrito sur de Nueva York, en el sureste de Estados Unidos, reveló este lunes un informe que destaca el excesivo uso de la fuerza contra adolescentes reclusos en la cárcel municipal Rikers Island, donde algunos resultaron heridos y con fracturas «sospechosas».
El informe denuncia serias agresiones a reclusos por parte del personal de la cárcel, la violencia entre confinados y la segregación como castigo, ejercidas entre 2011-2013, que evidencia el riesgo de los menores «debido al uso rampante de fuerza innecesaria y excesiva».
«La violencia es usada como castigo o venganza y los grupos especializados la ejercen de forma inhumana. Generalmente ocurre en áreas que no están bajo la vigilancia de cámaras de seguridad», afirma el texto.
En 2013, entre el 15 por ciento y el 25 por ciento de la población de adolescentes, cada día sufrió la segregación como castigo. «Muchos de estos adolescentes son particularmente vulnerables porque sufren enfermedades mentales», recalca el documento.
Resalta, además, mil 59 casos de lesiones entre los jóvenes. Asimismo, entre septiembre de 2011 y agosto de 2012 se reportaron 96 casos de fracturas «sospechosas» en los adolescentes. La Alcaldía de Nueva York recibió el informe, pero no devolvió respuesta.
