Una organización palestina de derechos humanos denuncia que el Gobierno israelí utiliza bombas de «dardos de acero» contra la población civil durante su operación en Gaza.
Según informa ‘The Guardian’, el Centro Palestino para los Derechos Humanos (CPDH) acusa al ejército israelí de usar en su operación en Gaza bombas de fragmentación que esparcen miles de dardos diminutos capaces de perforar un casco y de matar a una persona.
El CPDH asegura que este jueves el Gobierno de Tel Aviv lanzó seis proyectiles con dardos contra la localidad de Juzaa, al este de Jan Yunis de Gaza, y que a consecuencia de ello Nahla Khalil Najjar, palestina de 37 años, resultó herida en el pecho.
Un portavoz del ejército [israelí] no desmintió el uso de este tipo de proyectiles en el conflicto. «Como norma, el ejército solo utiliza armas que son consideradas legales, según el Derecho Internacional y de una manera absolutamente coherente con las normas de un conflicto armado», insiste.
A principios de julio el Ejército israelí puso en marcha el operativo Borde Protector contra la Franja de Gaza en respuesta a las decenas de cohetes lanzados desde el enclave palestino. Hasta el 17 de julio la actividad de Tel Aviv se limitó a ataques aéreos y marítimos. Sin embargo, a partir de la noche del jueves el Ejército israelí lanzó en la Franja de Gaza una operación terrestre cuyo principal objetivo, según Israel, es la destrucción de los túneles excavados por los militantes palestinos bajo la frontera conjunta. Tras 13 días de ofensiva israelí han muerto 438 palestinos y más de 3.000 heridos han resultado heridos, según el presidente palestino Mahmud Abbás.