Las declaraciones recientes hechas por el príncipe británico Carlos sobre el presidente de Rusia, Vladimir Putin, fueron condenadas hoy por el Ministerio de Relaciones Exteriores ruso, que las calificó de «inaceptables, ofensivas y peyorativas».
El vocero de la cancillería, Alexander Lukashevich, también acusó al príncipe de ser parte de una «campaña propagandística».
Las palabras de Lukashevich fueron la reacción del ministerio a la declaración hecha el lunes por el príncipe Carlos en Halifax, Canadá, en la que supuestamente comparó a las acciones de Putin en Ucrania con la apropiación de territorio llevada a cabo por Adolfo Hitler.
«Los medios de comunicación usan a los miembros de la familia real británica en la campaña propagandística contra Rusia sobre un complicado asunto internacional como la situación en Ucrania», declaró Lukashevich ante reporteros.
«Solicitamos explicaciones formales de la parte británica sobre las declaraciones del príncipe», dijo el diplomático, citado por la agencia de noticias Interfax.
La posición rusa sobre Ucrania es bien conocida por el mundo, incluidos los políticos británicos, agregó.
«Obviamente, nuestro enfoque ante una disputa de momentos graves difiere fuertemente y existen canales legítimos para discutirlos. No se supone que (los políticos británicos) promuevan sus opiniones en la amplia escena pública», afirmó el vocero.
Las declaraciones informales también generaron un acalorado debate en los medios de comunicación occidentales sobre si los miembros de la familia real británica deben hacer declaraciones públicas sobre asuntos políticos controvertidos.
MOSCU, (Xinhua)