Washington vuelve a culpar a Rusia pero no hace nada en la crisis ucraniana

La vicesecretaria de Estado de EE.UU., Victoria Nuland, acusó a Rusia de no cumplir sus compromisos para rebajar la tensión en Ucrania. La funcionaria no rebaja el tono pese al paso adelante dado por Rusia y sigue culpando a Moscú de agitar al este.

Victoria Nuland se enfrentaba en audiencia a un panel especial del Comité de Asuntos Extranjeros para tratar la posición de EE.UU. en esta crisis de Ucrania. Los representantes más conservadores, como algunos republicanos -como era de esperar-, dispararon duras palabras contra Rusia y pidieron más y más sanciones en la línea retórica de las últimas semanas. Además, criticaron la inoperancia de la Administración Obama.

Ante estos cuestionamientos sobre su propia actuación, Nuland se defendió criticando a Moscú. «Rusia no ha cumplido con ninguno de sus compromisos», declaró.
Nuland reconoció que las autoridades de Ucrania todavía no han desarmado a todos los grupos radicales del Sector Derecho

Más tarde reconoció que las autoridades de Ucrania todavía no han desarmado a todos los grupos radicales del Sector Derecho, por lo tanto reconociendo que Kiev ‘no ha hecho los deberes’ en este sentido.

Pero otro de los temas principales fue la imposición de sanciones con las que Washington sigue presionando a Moscú. Para algunos expertos, que EE.UU. presione con más sanciones solo revela su afán imperialista.

«Cuando EE.UU. de cualquier parte del mundo establece, direcciona, impone sanciones sobre algo que tiene que ocurrir fuera de sus fronteras estamos verificando que la soberanía de EE.UU. no se supedita a sus fronteras. En la política mundial EE.UU. se abroga el derecho de decidir lo que debe pasar en el mundo. Y este comportamiento de EE.UU. (…) utiliza mecanismos de esa naturaleza para convertirse en puertas de apertura, en avanzadas para los negocios», señaló a RT el director del diario ‘El Telégrafo’, Orlando Pérez.

Por otro lado el canciller ruso, Serguéi Lavrov, recalcó a su homólgo estadounidense en una conversación telefónica la necesidad de que Kiev cese ese operativo de castigo contra el sudeste ucraniano, desbloquee diversas localidades en esa zona del país, libere a presos políticos y lance una reforma constitucional completa. Esta es una retórica que en las últimas semanas ha pronunciado Moscú.

Por su parte la portavoz de Estado de EE.UU., Jen Psaki, afirmó en una rueda de prensa que si hay finalmente un referéndum el día 11, este «sería ilegal». También dijo que no ha visto movimientos de tropas rusas en la frontera con Ucrania los últimos días y sostuvo que EE.UU. destinaría algo más de 11 millones de dólares «para que las elecciones del próximo 25 de mayo se llevaran a cabo en un clima de normalidad».

Por otro lado, en la ciudad de Nueva York se han llevado a cabo protestas para pedir el cese de la intervencion estadounidense en Ucrania y para que Washington deje de subvencionar al Gobierno de Ucrania, que los manifestantes consideran tanto ilegítimo como fascista.