Cuatro casas con los techos desprendidos y 25 personas afectadas son los daños que ocasionaron vientos huracanados y un torrencial aguacero que cayó sobre la comarca rural Llano Grande N°. 1 en Masaya. “Las láminas de zinc salieron volando de las fuertes corrientes de aire”, dijo Johana Méndez unas de las perturbadas mujeres que vivieron el momento de terror.
Los daños fueron evaluados por miembros de defensa de defensa civil y funcionarios de la alcaldía municipal quienes entregaron en nombre del gobierno central algunos víveres.
En lo que va del presente invierno la población del municipio de Masaya ha sido azotada por dos eventos de esta naturaleza.