El acuerdo sobre Ucrania «es un triunfo de la diplomacia rusa»

El acuerdo de Ginebra sobre Ucrania es un éxito de la diplomacia rusa, dicen los expertos. Es más, Occidente entendió que la reincorporación de Crimea en Rusia es ya un hecho consumado, añaden en el Ministerio de Exteriores.

El profesor de Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú (MGIMO), Andrei Súshentsov, destaca que EE.UU. y la UE reconocieron en Ginebra unos puntos cruciales en los que Rusia ha insistido desde hace mucho tiempo: «la inadmisibilidad de la discriminación por ningún motivo, como étnico, religioso o lingüístico. Además, (la declaración de Ginebra) contiene un artículo que prohíbe las consignas antisemitas y nacionalistas. Por primera vez los estadounidenses y los europeos lo anunciaron y lo reconocieron».

«La declaración final incluye los puntos de vista de todos los participantes de las negociaciones. Por lo tanto, es un éxito, por supuesto», concluyó Súshentsov.

La declaración final incluye los puntos de vista de todos los participantes de las negociaciones. Por lo tanto, es un éxito

No solo en Rusia piensan que los acuerdos de Ginebra son un éxito. Según la ministra de Exteriores de Italia, Federica Mogerini, las negociaciones de este jueves significan «un giro de la crisis ucraniana y el inicio de una fase de diálogo». Se trata de «un paso importante» para solucionar la crisis ucraniana y el nacimiento de una posibilidad para prevenir la división de Ucrania, añadió el ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, citado por Ria Novosti.

Además, el representante permanente de Rusia ante la ONU en Ginebra, Alexéi Borodavkin, dijo al diario ‘Nasha Gazeta’ que «nuestros socios occidentales se han dado cuenta de que la reunificación de Crimea con la Federación de Rusia es un hecho consumado, por eso objetar es poco práctico y contraproducente».

Señaló que EE.UU. y la UE también han tenido conciencia sobre otro hecho evidente para Rusia: «no es la situación en Crimea la que es peligrosa, sino lo que está sucediendo en Ucrania, es decir, la división de la sociedad ucraniana, que provocaron los propios EE.UU. y la UE».