Los jóvenes salieron a las calles de París, Francia, para protestar contra la repatriación de las familias inmigrantes.
Las protestas se centraron en el caso de una joven de 15 años de Kosovo, detenida mientras viajaba en un autobús frente a sus compañeros de clase, y posteriormente deportada.
Este jueves la prensa francesa se hace eco de las numerosas críticas que ha suscitado esa decisión, de la que se hace responsable a la política de inmigración aplicada por el ministro del Interior, el socialista Manuel Valls.