El Consejo de Seguridad de la ONU autorizó este jueves el despliegue de cerca de 12.000 cascos azules en República Centroafricana para intentar darle seguridad a un país que desde hace un año sufre la violencia entre cristianos y musulmanes.
La resolución, propuesta por Francia, fue adoptada por unanimidad y prevé el despliegue de 10.000 soldados y 1.800 policías que formarán la Minusca (Misión multidimensional integrada de estabilización de las Naciones Unidas en República Centro Africana).
Los cascos azules relevarán en cinco meses a 6.000 soldados de la fuerza africana (MISCA), que desde hace meses junto a 2.000 militares franceses patrullan esta antigua colonia francesa en una operación conocida como Sangaris.
El inicio del despliegue de efectivos de los cascos azules fue fijado para el 15 de septiembre. La misión, cuyo jefe deberá ser un africano, se extenderá hasta el 30 de abril de 2015.
Las prioridades de la Minusca, que también incluye a civiles (administradores, ingenieros, abogados), serán proteger a la población y a los servicios de ayuda humanitaria, el mantenimiento del orden, el apoyo a la transición política, la detención de responsables de abusos, incluidos crímenes de guerra punibles por la Corte Penal Internacional.
La República Centroafricana estuvo durante diez meses bajo el poder de los rebeldes musulmanes de la Seleka, pero la nebulosa de milicias de autodefensa mayoritariamente cristianas hace temer a la ONU un genocidio étnico.
NACIONES UNIDAS, (AFP)