Ucrania acusa a a Rusia de los disparos que dejaron decenas de muertos en Kiev

Ucrania acusó el jueves al destituido presidente Viktor Yanukovich y a los servicios secretos de Moscú de ser responsables de los disparos contra manifestantes que provocaron en febrero al menos 90 muertos.

Este mismo jueves Rusia anuló el último descuento otorgado a Ucrania en el suministro de gas, una medida de presión contra las nuevas autoridades de Kiev, que ahora tendrá que pagar 485 dólares por 1.000 metros cúbicos, uno de los precios más altos que se aplican a países europeos.

«Yanukovich dio la orden criminal de disparar contra los manifestantes entre el 18 y el 20 de febrero», dijo el ministro interino del Interior ucraniano, Arsen Avakov, y aseguró que agentes rusos del FSB (ex-KGB) «participaron en la planificación y la ejecución de la supuesta operación antiterrorista».

En muchos casos las víctimas fallecieron aparentemente por disparos de francotiradores. Ambas partes se acusan mutuamente de haber desatado la violencia pero hasta ahora no se había llevado a cabo una investigación de los hechos.

Según las autoridades rusas, fueron los grupos ultranacionalistas ucranianos los primeros en disparar contra la policía, en un intento de atribuir la violencia al presidente Yanukovich y a sus aliados de Moscú.

Las nuevas acusaciones del gobierno de Kiev podrían intensificar aún más la tensión entre Rusia y los países occidentales. El miércoles el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, calificó de «increíblemente inquietante» la presencia masiva de tropas en la frontera ucraniana.

KIEV, (AFP)