Medios de comunicación siguen de cerca la impresionante trayectoria de un niño prodigio, que sufre una forma de autismo, pero a sus 12 años empezó a ampliar la teoría de la relatividad de Einstein, por lo que para algunos será un futuro premio Nobel.
Jacob Barnett, que tiene un coeficiente intelectual (CI) de 170 más alto que el de Albert Einstein, desde los 14 años ya estudia un doctorado en física cuántica en la Universidad de Indiana (EE.UU.), donde ingresó con apenas 11 años y luego de un año ya recibía un sueldo como profesor adjunto.
El niño prodigio, que se encerró en su mundo rodeado de libros a los 2 años tras ser diagnosticado con autismo moderado, dejó de hablar, pero en vez de ello, aprendió cálculo, álgebra, geometría y trigonometría por su propia cuenta. Además, según su madre, Kristine Barnett, cuando Jake recuperó el habla, aprendió cuatro idiomas.
Al principio, los padres de Jake estaban preocupados por el diagnóstico de su hijo, pero pronto se dieron cuenta de lo especial que era su don. El niño llenaba cuadernos de notas con dibujos de formas geométricas complejas y cálculos, antes de coger rotuladores y escribir ecuaciones en las ventanas y las paredes de su casa.
A los 3 años, Jake estaba resolviendo rompecabezas 5.000 piezas e incluso estudió un mapa de carreteras del Estado, recitando todas las carreteras y el prefijo de la placa de memoria. A la edad de 8 años, empezó a asistir a las clases de astrofísica avanzada de la IUPUI (la Universidad de Indiana en Indianápolis).
Según sus padres, Jake tiene problemas para dormir, ya que él piensa constantemente en números. Pero lejos de quejarse, el niño ha convertido las noches en vela en un entretenimiento: tratando de desacreditar la teoría del Big Bang.
A los 12 se embarcó en su proyecto más ambicioso: la versión ampliada de la teoría de la relatividad de Einstein. Su madre, que según confesó, no tiene ni idea de matemáticas, sin saber si su hijo estaba diciendo tonterías o cosas geniales, envió un video de su teoría al famoso Instituto de Estudios Avanzados, cerca de la Universidad de Princeton.
El profesor de astrofísica del Instituto, Scott Tremaine, confirmó la autenticidad de la teoría de Jake. En un correo electrónico a la familia Barnett escribió: «Estoy impresionado por su interés en la física y la cantidad de material que ha aprendido hasta ahora. La teoría en la que él está trabajando involucra varios de los problemas más difíciles de la astrofísica y física teórica. Cualquier persona que los resuelve estará en la línea de recibir un premio Nobel».