El ministro jefe del estado hindú de Uttar Pradesh, Akhilesh Yadav, colocó el domingo la primera piedra de lo que será en cinco años el templo más alto del mundo.
Situado cerca de la ciudad de Vrindavan, el templo tendrá 70 pisos y una altura de 213 metros, según la prensa hindú. El edificio, llamado Vrindavan Chandrodaya Mandir, será escenario de diversos festivales.
El presupuesto del proyecto, que corre a cargo de la Asociación Internacional para la Conciencia de Krishna (ISKCON, por las siglas en inglés), supera 50 millones de dólares.
