Con una ofrenda floral colocada en la tumba donde descansan los restos del comandante guerrillero Camilo Ortega Saavedra, miembros de la Juventud Sandinista empuñaron sus brazos para rendirle honores. Al mismo tiempo aseguraron que seguirán en la lucha por una Nicaragua Libre.
Frente a su sepulcro en el Cementerio General de Managua, los jóvenes entonaron música revolucionaria y corearon a todo pulmón «¡Vivirás Monimbó, llama pura del pueblo, oigo tu corazón… ataval guerrillero, donde el indio cayó, floreció el granadino!», una de las canciones representativas de la gesta heroica del comandante Camilo Ortega Saavedra, llamado el apóstol de la unidad.
Los jóvenes sandinistas aseguraron que Nicaragua lleva en el corazón al comandante Camilo.