Miles de peces muertos fueron hallados en las orillas de la contaminada bahía de Río de Janeiro, cerca del aeropuerto internacional y a unos 30 km de donde se celebrará la regata olímpica en siete meses.
Las sardinas son empujadas por las olas hacia la orilla, donde se mezclan con los montones de basura allí acumulados, constató una periodista de AFPTV.
Funcionarios del Instituto de Medio Ambiente del estado de Río de Janeiro (Inea) tomaron muestras en el lugar para analizarlas en un laboratorio, informó el sitio web del diario O Globo.
El fenómeno, que las autoridades han dicho responde al calor, ya se repitió en otras oportunidades. En octubre 2014 y luego en febrero 2015, cuando 12,3 toneladas de pequeños peces plateados fueron retirados de las playas de este sector llamado Ilha do Governador.
«No es un fenómeno, es el agua que está muy contaminada», protestó Roger Teixeira, un agente turístico de 45 años.
El Inea investiga asimismo si estas sardinas fueron descartadas en el agua por pescadores debido a su bajo valor comercial.
La bahía de Guanabara, una gran letrina a cielo abierto donde se celebrarán las competencias de vela, no pudo ser descontaminada como prometió el gobierno del estado para el legado olímpico.
Pero los organizadores de los primeros Juegos de Sudamérica aseguran que el área donde se realizará la competencia de vela estará limpia y no pondrá en riesgo la salud de los atletas.