Miles se han unido a la operación de búsqueda de los 91 desaparecidos tras el deslizamiento de tierras ocurrido el domingo en la ciudad sureña china de Shenzhen. Un total de 78 excavadoras y 1.200 efectivos de fuerzas de rescate trabajan en el lugar.
Actualmente, 2.906 miembros de equipos de salvamento, entre ellos unos 800 de las fuerzas armadas, están excavando en medio de sedimientos y escombros en el parque industrial. Las excavadoras, que llegaron al lugar en la mañana de hoy lunes, fueron las primeras en entrar en acción.
Cincuenta y nueve hombres y 32 mujeres seguían desaparecidos hasta la mañana de este lunes después del desastre causado por el colapso de una gran cantidad de ruinas de obras.
Al menos 16 personas han sido hospitalizadas, incluidos menores.
Se encuentran en condiciones estables, y diez doctores experimentados procedentes de Guangzhou y Beijing, mayormente ortopedistas, neurocirujanos y traumatólogos, están en Shenzhen para ayudar a tratar a los heridos, según la Comisión Nacional de Salud y Planificación Familiar.
También se ha establecido un centro médico con 16 doctores cerca de la escena, informó a Xinhua un médico del Hospital Central del Nuevo Distrito de Guangming.
El deslave de tierras cubrió una superficie de 380.000 metros cuadrados con sedimientos de hasta diez metros de profundidad, señaló Liu Qingsheng, teniente de alcalde de Shenzhen, en una rueda de prensa organizada el lunes.
Las 33 edificaciones enterradas incluyen 14 edificios de fábricas, dos bloques de oficinas, un comedor, tres dormitorios y 13 construcciones de baja altura.
Es improbable que se produzcan más corrimientos de tierras, de acuerdo con un grupo de 200 expertos en geología y gas incorporado al rescate.
PetroChina, el principal productor de crudo y gas de China, es la propietaria del gasoducto Oeste-Este que estalló cuando el desastre afectó a la zona. La empresa anunció que la tubería rota de 400 metros de longitud ha sido vaciada y que se está construyendo un conducto temporal.
Se han establecido dos puntos de control para registrar y verificar la información sobre las personas desaparecidas.
Los 1.500 individuos evacuados después del incidente se están alojando en campamentos temporales en un centro deportivo, una estación comunitaria y un hospital en las cercanías del sitio.
«Estamos ofreciendo comida y bebidas, colchones y edredones para satisfacer las necesidades básicas de la gente», afirmó Chen Jun, voluntario del Centro de Deportes del Distrito de Guangming.