El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, lamentó amargamente este jueves que matanzas de inocentes se hayan tornado «rutina» en el país, y formuló un dramático llamado al Congreso a discutir una legislación sobre control de armas de fuego.
«De alguna forma, esto se ha tornado rutina. Mi respuesta, en esta sala, se volvió una rutina», dijo Obama en la Casa Blanca, después de que un hombre matara por lo menos a siete personas en una universidad de Oregon (noroeste del país), siendo luego abatido por la policía.
Washington, Estados Unidos | AFP