Autoridades tunecinas intensificaron la seguridad en los sitios turísticos del país, ante la posibilidad de que se registren nuevos atentados terroristas, luego de la matanza del viernes pasado en la playa de Susa, que dejó 39 muertos.
El ministro del Interior de Túnez, Mohamed Najem Gharsalli, precisó que al menos mil policías adicionales fueron desplegados en sitios turísticos y playas de todo el país, ante la posibilidad creíble de que se registren más actos terroristas.
La declaración destacó que el objetivo es garantizar la seguridad de los miles de turistas extranjeros que se encuentran en el país, ubicado en el norte de África, y evitar que se repitan actos similares a los de hace dos días en Susa, aunque no dio más detalles sobre las posibles amenazas.
Al menos 39 personas, en su mayoría turistas británicos, murieron el viernes pasado, cuando un pistolero abrió fuego de manera indiscriminada contra decenas de visitantes que se asoleaban en la playa de Susa, al sur de esa capital, frente al hotel Imperial Marhaba.
Otras 40 personas resultaron heridas, entre ellas 25 británicos, en el ataque reivindicado por el Estado Islámico y registrado el mismo día en el que hubo un atentado en Kuwait, que también fue adjudicado por el mismo grupo extremista.
La seguridad en Túnez fue redoblada, luego de que el Ministerio británico del Exterior advirtió a sus ciudadanos que están en Túnez mantenerse alerta, ante la posibilidad de que se registren nuevos ataques.
El país podría tener un serio problema con la llegada de turistas, pues los visitantes tendrán temor de un nuevo atentado, ya que el mismo gobierno considera que sí es posible.
Agencias
