La Unión Europea lanzó ayer una operación naval para evitar que los traficantes de personas lleven migrantes hasta Europa a través del Mar Mediterráneo en embarcaciones inseguras, una práctica lucrativa y en ocasiones mortal.
Más de 100 mil migrantes han llegado a Europa en lo que va del año, y unos dos mil murieron o desaparecieron durante su peligrosa travesía al continente europeo. Docenas de embarcaciones salen cada semana de una anárquica Libia para intentar llegar a Grecia e Italia.
La operación naval, lanzada oficialmente en una reunión de cancilleres de la UE en Luxemburgo, funcionará en aguas y espacio aéreo internacionales hasta que la Unión Europea obtenga una resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que respalde sus esfuerzos, así como permiso del gobierno libio para entrar en su territorio.
La Unión Europea pretende desmantelar el modelo de negocio de los traficantes destruyendo sus embarcaciones.
Pero no ha encontrado un apoyo rápido en Naciones Unidas, entre críticas de grupos de defensa de los refugiados sobre que el plan sólo privará a los migrantes que huyen de la pobreza y la guerra de una vía de escape, en lugar de resolver el problema.
Agencias