El hallazgo se produjo durante la excavaciones en los alrededores del mausoleo del líder espiritual de los musulmanes ismailíes, Agha Khan III, en la ciudad de Asúan, en la ribera oeste del río Nilo.
Junto a los sarcófagos hallaron estatuas de loza que representan a los cuatro hijos del dios Horus, así como varios amuletos y estatuillas del halcón, representación de Horus. Según las creencias de aquella época, este dios protegía de los demonios y malos espíritus.
Según el ministro egipcio de Antigüedades, Mamduh al Damati, se trata de un descubrimiento muy importante, ya que se trata de la primera vez que en esta zona aparecen tumbas del Periodo Tardío (724-343 a.C).