Corea del Norte ha empezado a vender grandes cantidades de oro. El comprador principal es China. Según la agencia surcoreana de noticias Yonhap, de este modo Pyongyang está intentando aliviar su delicada situación financiera.
«Desde hace unos meses Corea del Norte ha empezado a vender incluso sus reservas de oro», asegura Yonhap haciendo referencia a una fuente anónima. La agencia destaca que esto es una indicación de que el país está al borde de un colapso económico, ya que estas acciones van en contra de la orden directa histórica del fundador del Estado norcoreano, Kim Il-sung, de no vender nunca el oro: Pyongyang siempre consideró que la posesión de este metal precioso es un elemento clave que apoya la posición del país en la arena internacional.
Corea del Norte no reporta sus reservas de oro ante el Fondo Monetario Internacional y estas tampoco aparecen en las estadísticas oficiales. Sin embargo, en 2007 la inteligencia de Corea del Sur reportaba que su vecino del norte cuenta con un depósito oficial de 2.000 toneladas de este metal, equivalente a unos 8.000 millones de dólares estadounidenses. En caso de resultar verdadero este dato, Pyongyang sería uno de los mayores poseedores del oro del mundo. Para tener una referencia con la que comparar, las reservas estatales chinas de oro son de la mitad, según la cifra oficial reportada por Pekín.
Sin embargo, no todos los expertos coinciden en que la venta de oro por parte de Pyongyang señala un colapso económico causado por las sanciones internacionales destinadas a restringir el programa nuclear del país. «Corea del Norte ha vendido su oro en muchas ocasiones y lo hace rutinariamente», aseguró al diario ‘Huffington Post’ el investigador superior de Corea Moderna en la Universidad de Leeds (Reino Unido), Aidan Foster Carter.