La agencia de inteligencia alemana, la BND, durante años ayudó a la Agencia de Seguridad Nacional de EE.UU. (NSA) a llevar a cabo espionaje contra miembros del Gobierno francés y la Comisión Europea, revelan medios alemanes.
«Durante varios años la NSA utilizó la base de la BND, ubicada en la localidad bávara de Bad Aibling, para espiar a los Estados europeos. Entre los objetivos se encontraban altos funcionarios del Ministerio de Exteriores francés, del Palacio del Elíseo y de la Comisión Europea», informa el diario ‘Süddeutsche Zeitung’ citando una investigación interna llevada a cabo en la agencia de inteligencia alemana y la Cancillería Federal germana.
Según la información disponible, EE.UU. realizaba vigilancia electrónica de sus objetivos, entre los que se encontraban no solo políticos, sino también compañías europeas, a través de los recursos técnicos de la BND. Además, la NSA proporcionaba de forma deliberada información y datos como direcciones IP a la agencia de inteligencia alemana para que ‘colaborara’ con su propósito.
Aunque la BND se dio cuenta de que muchas de las peticiones estadounidenses contradecían a los intereses alemanes o europeos, esta no informó a la Oficina de la Cancillería Federal de que prestaba ayuda a los servicios de inteligencia norteamericana.