Al menos 15 agentes han resultado heridos y 27 manifestantes han sido detenidos en Baltimore, EE.UU., como consecuencia de los enfrentamientos entre la Policía y las personas que se habían reunido tras despedir los restos mortales de Freddie Gray, el joven afroamericano que falleció a causa de una grave herida en la espalda mientras se encontraba en custodia policial. El gobernador de Maryland ha declarado el estado de emergencia, se ha activado la Guardia Nacional.
A su vez, la adjunta general de la Guardia Nacional de Maryland, Linda Singh, ha solicitado a las autoridades de los estados vecinos el envío de hasta 5.000 efectivos con el fin de ayudar a los agentes de Baltimore a sofocar las protestas. Los soldados de la Guardia Nacional patrullarán las calles de Baltimore desde la noche del lunes. Singh ha aconsejado a los residentes «ponerse a cubierto» durante la noche. Asimismo, la alcaldesa de Baltimore, Stephanie C. Rawlings-Blake, ha establecido un toque de queda que estará en vigor durante toda la semana entre las diez de la noche y las cinco de la madrugada.
Tras el inicio del funeral de Freddie Gray, que se realizó en una iglesia de Baltimore, un numeroso grupo de jóvenes se ha enfrentado a los policías antidisturbios cerca del centro comercial Mondawmin Mall, en el noroeste de la ciudad. Pocas horas antes la alcaldesa de la ciudad hizo un llamamiento a la calma. El centro comercial cerró por la tarde cuando los manifestantes y la Policía se reunieron en la zona. Los jóvenes han tirado piedras, botellas y otros objetos a los oficiales.