El presunto autor de la masacre de cuatro niños en el departamento del Caquetá, suroeste de Colombia, quien se había fugado de la cárcel en la madrugada del domingo, fue recapturado pocas horas después, informó este lunes la policía.
Tras la fuga por unas horas de Cristopher Chávez, alias El Desalmado, «la policía implementa una especie de ‘plan candado'» para evitar que estos hechos se produzcan, dijo en rueda de prensa el general Rodolfo Palomino, director de la policía de Colombia.
«En ese trabajo, logramos recibir una información que de inmediato permite la actuación de la policía y es así como se logra en inmediaciones del municipio de Morelia (Caquetá), la captura de este individuo» que había fugado de la cárcel, agregó.
Luego de hacerse público su fuga de la prisión de mediana seguridad Las Heliconias, de la ciudad de Florencia, capital del Caquetá, la policía ofreció unos 19.500 dólares por información sobre Chávez.
Después de huir del penal, Chávez logró trasladarse a Morelia, un municipio ubicado a 20 minutos de Florencia.
Palomino planteó además la presunta colaboración de funcionarios de la prisión con el recluso para facilitar su fuga, quienes permitieron que una herramienta para cortar alambres «haya llegado a sus manos», agregó el general.
Los niños víctimas de Chávez fueron encontrados muertos en su casa rural en el Caquetá el 5 de febrero pasado, con un impacto de bala en la cabeza. Los pequeños, que tenían cuatro, 10, 14 y 17 años de edad y eran miembros de una misma familia, estaban solos en el momento de la masacre porque sus padres habían viajado a la ciudad de Florencia para matricularlos en el colegio.
Bogotá, Colombia | AFP