La Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense almacenó datos electrónicos personales de ciudadanos británicos con el permiso de Londres, según documentos filtrados por Edward Snowden.
Las autoridades británicas dieron su acuerdo en 2007 para que los datos de teléfonos, de internet y correos electrónicos de sus ciudadanos pudieran ser retenidos y analizados por la NSA, algo que no permitía hasta entonces.
Agencias