Bruno Mars y los Red Hot Chili Peppers brindaron un show inolvidble durante el halftime del Super Bowl este domingo en el Metlife Stadium de New Jersey.
Donde los Seahawaks de Seattle se coronaron campeones tras vencer a los Broncos de Denver por 43 a 8. Mars arrancó tocando la batería y luego cantó algunos de sus hits como «Locked Out of Heaven» y «Just the Way You Are». Los Chili Peppers se le unieron en pleno show, entrando de lleno con su clásica «Give It Away», ante un despliegue de luces y fuegos artificiales realmente espectacular. Un show con todas las letras.
AGENCIAS
