En las redes sociales, a menudo se encuentran historias sorprendentes y controversiales, como el caso de Aisylu Chizhevskaya-Mingalim, una mujer que se enamoró profundamente de su hijo adoptivo, Daniel, de 22 años, y finalmente se casó con él.
El relato se volvió rápidamente viral, suscitando cientos de críticas y etiquetas de «incestuoso», a pesar de que no hay vínculo sanguíneo entre ambos.
La historia se desplegó con Aisylu anunciando sus planes de huir de su lugar de residencia para trasladarse a otro lugar con su ahora esposo, así como sus otros cinco hijos; también adoptados. El objetivo de la mudanza, según una entrevista que brindó al diario The Mirror, es «vivir libremente».
El matrimonio entre Aisylu Chizhevskaya Mingalim, de 53 años, y Daniel Chizhevsky, de 22 años ha generado un intenso debate; ya que antes de convertirse en esposos, ella había sido su madre adoptiva.
Esta mujer se casó con su hijo 31 años menor
La mujer lo acogió en un orfanato cuando él tenía 14 años, pero con el tiempo, el vínculo materno evolucionó hacia una relación de pareja.
En la entrevista, Aisylu describe su matrimonio con su hijo como algo «espiritual», insistiendo en que su conexión con Daniel es perfecta.
Argumenta que ellos se entienden a la perfección y están profundamente conectados emocionalmente; lo que los llevó a formalizar su relación mediante el matrimonio el 20 de octubre en un lugar que aún se desconoce.
El caso ha desatado una ola de opiniones enfrentadas en las redes sociales, donde la gente se muestra dividida entre la comprensión de un lazo emocional fuerte y el rechazo hacia lo que consideran una relación inapropiada; a pesar de la falta de consanguinidad entre la pareja.
Esta historia resalta las complejidades de las relaciones familiares y sus transformaciones en diferentes contextos culturales y personales.