El pasado lunes se cayeron por seis horas varias de las redes sociales entre ellas una de las más usadas en mensajería y que afectó a millones de personas y no solo por temas laborales y monetarios, sino también por el lado social, muchos sufrieron de nomofobia.
Hay que destacar que muchos están acostumbrados a estar muy unidos al smartphone y las redes sociales como parte incluso de una nueva extensión del cuerpo, que al desconectarse de ellas genera una gran problemática.
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Es por eso que si fuiste de los que entró en pánico dentro de las horas que se cayeron las redes sociales, es muy probable que tengas nomofobia, una adicción y el miedo irracional por estar incomunicado en las plataformas sociales en Internet y que a continuación te explicamos.
¿Qué es la nomofobia?
El término de nomofobia proviene del nombre en inglés «non-mobile-phone-phobia», y las causas por las que aparece se centran en cuatro factores principales, según estudios médicos:
-Pérdida de conexión.
-Incapacidad de acceder a la información.
-Imposibilidad para comunicarse.
-Renuncia a la comodidad.
-Hay que destacar que una persona nomofóbica presentará un gran miedo al comenzar a agobiarse hasta llegar incluso a quedar paralizada por no llevar consigo su teléfono celular o tener acceso a sus redes sociales.
Se destaca que la ansiedad por no poder comunicarse por las redes sociales o estar en vilo por saber si alguien intenta comunicarse con ella o él, entorpece y dificulta la vida cotidiana del nomofóbico al no tener el uso inmediato de la información que necesita conocer para mantener el control de su vida.
Lamentablemente la nomofobia afecta la personalidad del usuario con su autoestima y constantemente vive con estrés; y ansiedad que afecta su rendimiento personal en su vida cotidiana.
¿Quiénes pueden parecer este trastorno?
Las personas que pasan más tiempo utilizando sus dispositivos móviles son las más propensas a desarrollar nomofobia; además el comportamiento obsesivo compulsivo, la sensibilidad interpersonal y no dormir bien influyen para que dicha patología surgida tras la revolución digital crezca.
Cabe destacar que las consecuencias por tener nomofobia se traducen en desarrollar irónicamente aislamiento social; malos hábitos alimenticios y menor rendimiento al tener mayor distracción en el trabajo o en la escuela.