Dormir mal de manera crónica es uno de los mayores riesgos de las personas. Médicos y especialistas sitúan entre 7 y 8 horas al día el tiempo de sueño ideal, pero si no se cumple ese horario se corren riesgos de sufrir hipertensión, obesidad, depresión, pérdida de memoria, trastornos psiquiátricos y, así, un largo etcétera de problemas derivados del trastorno del sueño.
Aparentemente, Daisuke Hori no sufre ninguna de esas complicaciones. Y eso, a pesar de que, según su testimonio, apenas duerme 30 minutos al día desde hace 12 años. Hori es un youtuber japonés de 36 años que se ha hecho viral a raíz de contar su testimonio. Y lo más curioso de todo es que reducir sus horas de sueño ha sido por voluntad propia.
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Daisuke Hori es el presidente de la Asociación de durmientes de corta duración de Japón. Asegura que cuando dormía 8 horas diarias, apenas tenía tiempo para hacer todas las cosas pendientes de su día a día, así que decidió probar a estirar su jornada, reduciendo las horas de sueño. Así consiguió dormir solo media hora cada día y, según él, sin sufrir problemas secundarios.
El truco de la cafeína
Tal y como publica Times Oddity Central, Hori quiso que todo el mundo viera cómo vivía, por lo que aceptó que un equipo de televisión le siguiera durante tres días. El primero de ellos, quedaron con él a las 8 de la mañana y, durante todo el día, fue al gimnasio, trabajó, escribió, quedó con amigos e hizo un montón de cosas hasta que se acostó a las 2 de la madrugada.
Ha entrenado para ir reduciendo sus horas de sueño al día
Lo más impresionante es que apenas 26 minutos después, Daisuke Hori se despertaba sin necesidad de una alarma y estaba preparado para un nuevo día. Pasa las noches con amigos que también duermen poco, jugando a videojuegos y navegando por internet. Cuando llega la hora se va al gimnasio y comienza un nuevo día… que para él ya lleva varias horas.
Hori asegura que llegó al punto de dormir solo media hora después de reducir el sueño poco a poco con el paso del tiempo y que ahora ya no necesita más. Y aunque no hay ninguna prueba científica de cómo es su estado de salud, reconoce que en ocasiones tiene sueño, aunque en esos casos consume café y otras bebidas con cafeína para regular los niveles de insulina y resistir despierto. Hoy se sigue sintiendo «sano y enérgico».
Por MILENIO
