La insólita y extraña adicción dejó impactados a varias personas, una mujer de 26 años de Estados Unidos se comió las cenizas de su esposo y bajó veinte kilos.
De acuerdo con lo que dice la mujer, el hombre había muerto en 2011 y desde entonces ella lo llevaba a todas partes hasta que comenzó a comérselo.
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Tennessee Casie, de 26 años, estuvo casada diez meses con quien consideraba el amor de su vida; pero este lamentablemente murió en 2011 a causa del asma, desde entonces llevó las cenizas a todos lados hasta que comenzó a comérselas.
«No quería borrarlo, ese es mi marido, así que me lamí los dedos y aquí estoy y no puedo parar, me estoy comiendo a mi marido»; comentó la mujer tras una entrevista en 2019.
Comenzó a comerse las cenizas de su esposo
El día que comenzó a comerse las cenizas de su esposo fue cuando las transportaba de un lado a otro y de repente se le cayeron en el carro; ella se negaba a tirarlas, por lo que comenzó a lamerlas en un acto de desesperación para no perder lo que le quedaba de su esposo.
Desde entonces ella come un poco de las cenizas de su esposo entre cinco y seis veces al día. Y la forma de hacerlo es muy peculiar: primero lame su dedo, y luego ingiere las cenizas mordisqueándolas, el sabor, al decir de ella, es como la de un huevo podrido.
Extraño hábito el de una mujer en Estados Unidos
Desde que comenzó a comerse las cenizas de su esposo Casie ha bajado 20 kilos, pero esto se debe; ya que solo se come los restos de su esposo y esto podría causarles daños severos en su salud.
La mujer señala que comerse los restos de su esposo le causa sentimientos de culpa; y que este extraño hábito se ha convertido en una obsesión que cada vez le deja menos cenizas.