Exponerse al resplandor azul de los iPads, teléfonos inteligentes y otros dispositivos electrónicos antes de acostarse puede ser más destructivo para nuestros patrones de sueño de lo que creemos, e incluso afectar a nuestra salud a largo plazo, según un nuevo estudio publicado en la revista estadounidense ‘Proceedings of the National Academy of Sciences.
«Se puede tener un impacto mayor de lo que pensábamos», dijo Anne-Marie Chang, profesora de la Universidad de Penn State y coautor del estudio.
Durante un experimento de hospitalización de dos semanas con una docena de adultos, se les pidió a algunos participantes a leer en un iPad durante cuatro horas cada noche antes de acostarse, durante cinco noches consecutivas. Otros leen libros impresos, después de una semana, los grupos cambiaron.
Los investigadores encontraron que los participantes que usan iPads mostradas reducción de los niveles de melatonina, una hormona que normalmente aumenta en la noche y ayuda a inducir el sueño. Se llevaron más tiempo en quedarse dormidos, y pasaron menos tiempo en REM restaurativa, o movimiento rápido de los ojos, el sueño.
Además, los lectores de iPads reportaron estar somnoliento y menos alerta a la mañana siguiente, aún después de ocho horas de sueño. También mostraron retraso ritmos cardiacos.
Czeisler Charles Czeisler, director de la División de Medicina del Sueño de la Facultad de Medicina de Harvard, dijo que a medida que los dispositivos electrónicos se convierten en sólo más frecuente, y que su uso se hace más omnipresente, su papel en la pérdida significativa del sueño podrían llevar a consecuencias, Por ejemplo, la inhibición crónica de la melatonina se ha relacionado con un mayor riesgo de los cánceres de próstata, colorrectal y de mama. Y una persistente falta de sueño se ha asociado con la obesidad y la diabetes.
Agencias
