Perder peso es algo bastante complejo si tenemos en cuenta que la mayor parte de las dietas nos exigen renunciar a prácticamente todos los caprichos y que, en ocasiones, nuestra fuerza de voluntad puede con nosotros. Pero con unos cuantos trucos, seguramente puedas superarlo. ¿Quieres probarlos?
No hagas mucho, muy rápido
Cuando empezamos un plan para perder peso, solemos cometer el error de hacer mucho, muy rápido. Y enseguida perdemos las ganas y la energía. Así que lo mejor es ir poco a poco, pero sin pausa.
El deporte no tiene premios, es un premio
Si después de hacer deporte te permites caprichos, puede que estos hagan que el deporte se quede sin efecto, además, anulan la actitud que deberías adoptar. Y es que el deporte es en sí mismo un premio que te das.
Planea para medir tus resultados
Si no planeas tus acciones, difícilmente vas a poder probar resultados. Y si no tienes resultados, es muy poco probable que estos te puedan animar a continuar. Así que hay que hacer un planning cuanto antes.
Necesitas comer para hacer deporte
Dejar de comer después de hacer deporte no es la solución para bajar de peso. De hecho, tu cuerpo ha quemado energía, así que tienes que compensarlo. Para hacerlo, necesitas comer menos calorías de las quemadas, y siempre eligiendo los nutrientes más adecuados.
Elige un deporte que te guste
Elegir el deporte por el número de calorías que puedes quemar con él no es una buena idea. Puedes estar una semana completa haciendo algo que no te gusta, pero si de verdad te gusta, harás que forme parte de tu vida para siempre.