Cómo ahorrar dinero en el supermercado

Ahorrar en nuestro ticket de la compra es fácil si seguimos una serie de pautas sencillas. Y es que si nos descuidamos un poco, podemos acabar gastando más de lo que teníamos pensado en un principio, y casi sin saber por qué. Por ello, te recomendamos leer estos consejos de unComo para saber cómo ahorrar dinero en el supermercado.

No comprar comida precocinada. Es una opción muy cómoda si estás falto de tiempo o de ganas de cocinar, pero su precio es muy superior al de los productos frescos.

Cocina raciones grandes, guarda en ‘tuppers’ o fiambreras y congela para otro día. Ahorrarás mucho más de lo que piensas, ya que además gastarás menos en electricidad o gas al tener que cocinar menos veces.

Lleva la lista de la compra ya hecha y trata de evitar las compras compulsivas. Piensa si realmente necesitas adquirir ese producto antes de cogerlo de la estantería.

Mira bien cuando estés buscando un producto en el pasillo de cualquier supermercado. No por casualidad los productos más caros son los que suelen colocarse a la altura de los ojos y el pecho, mientras que los más baratos suelen estar más escondidos, y a veces tienes que agacharte para cogerlos.

No vayas a hacer la compra a la hora de comer o de cenar, de forma inconsciente acabarás comprando más comida si tienes hambre.

Fíjate bien en las ofertas del día y compara si te sale rentable cambiar tu marca habitual al menos por esa vez para ahorrar dinero en el supermercado.

Ojo con las ofertas «trampa». Mira bien la fecha de caducidad de los productos en oferta, calcula la cantidad exacta de producto que estás comprando y valora si realmente te va a suponer un ahorro.

Si pagas en las cajas donde haya menos cola no solo ahorrarás tiempo, sino que evitarás más fácilmente la tentación de echar compulsivamente algún producto más a la cesta, de los que suelen colocarse junto a las cajas registradoras, y que generalmente son de bajo precio.

Guarda y aprovecha todos los cupones descuento que puedas, y mira bien las fechas para las que son válidas estas promociones.

Si sabes de antemano que vas a comprar pocos productos procura coger una cesta de mano en lugar del carrito de la compra. Así tendrás menor tentación de llenarlo de productos.

Si puedes, no compres solo en un único supermercado. Mira bien qué productos son más baratos en uno u otro sitio, y divide tus compras en función de lo que necesites en cada momento.

Si coges el coche para hacer la compra en un supermercado o hipermercado lejos de tu domicilio, añade también el coste de la gasolina o del parking al total de la compra. Quizá no te salga tan rentable como piensas.

Lleva siempre tus propias bolsas de casa, ya sean de plástico o de tela. Así te ahorrarás tener que pagar el coste de cada bolsa en la caja, aunque sean solo unos céntimos. Al cabo del año también se acaba notando, aunque no lo parezca.

Al comprar la carne también es preferible comprar una pieza entera y trocearla nosotros mismos, antes que comprar bandejas de filetes o de carne picada. Intenta comer más sano; una dieta con menos carne y más verdura no solo es más equilibrada, sino que además resulta mejor para tu bolsillo.