Andrew Latham es un joven de 38 años de edad, que sufre de un curioso sindrome desde su nacimiento, es el de la Hiperekplexia, un trastorno neurológico que detiene su cerebro desde la supresión de shock. Como resultado, todo su cuerpo se tensa cada vez que oye fuegos artificiales, los perros ladrando, o incluso a alguien toser.
La hiperekplexia ("sorpresa exagerada") es un transtorno neurológico caracterizado clásicamente por respuesta de sobresalto pronunciadas a estímulos táctiles o acústicos.
"Los perros ladrando, la gente tosiendo, fuegos artificiales – básicamente cualquier cosa inesperada – me asusta y me hace saltar" dice Latham, quien reconoce haber sufrido bullyng por sus compañeros de clases cuando estaba en la escuela.
También debe tener mucho cuidado cuando sale, ya que incluso cruzar la calle puede ser un peligro si él está sorprendido por el sonido de un motor o el sonar la bocina. A pesar de esto él lucha por llevar una vida normal, apoyado por su familia y sigue apoyando a su equipo favorito de fútbol local, Accrington Stanley, y comenta que puede lidiar con el ruido estridente en las gradas, por la gran pasión que este deporte le genera y por la manera en que lo juega su equipo.
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