Cuando nuestros hijos son pequeños podemos concretar citas de juegos para ellos, incluso muchos de nosotros llegamos a trabar amistad con los padres de los amigos de nuestros hijos. Es muy sencillo controlar las amistades de nuestros hijos cuando son niños, el problema viene cuando comienzan a crecer.
Al llegar a la adolescencia comienzan a influir diversos factores que motivan a nuestros hijos a cambiar de amistades, muchas de ellas puede que no nos gusten, es por eso que debemos inculcar en nuestros hijos una forma positiva de escoger sus amistades.
La amistad una herramienta positiva en los adolescentes
Cuando nuestros hijos se encuentran en la etapa adolescente, la amistad suele ser una gran herramienta positiva, ya que los ayuda a ser más sociables, independientes y seguros de sí mismos. Por supuesto que este comportamiento tiene lugar de acuerdo a los intereses de las amistades que nuestro hijo frecuenta. El ejemplo más común es, el muchacho más inteligente del salón busca amigos afines a sus intereses rodeándose así de compañeros y compañeras que lo ayuden en su superación personal, dando como resultado, un buen estudiante y a la vez un buen amigo.
El otro lado de la moneda
Pero, ¿qué pasa cuando nuestro adolescente empieza a juntarse con compañeros desordenados, que frecuenta amistades con actitudes rebeldes? Es muy probable que nosotros como papás queramos impedir este tipo de amistad, el problema radica en que nuestros hijos ya no son unos niños, y desafiar o ponernos en contra de esas amistades, solo hará que se acreciente y que nuestro adolescente siga fomentando aún más esa amistad.
Ver también: Por qué los adolescentes cambian de amistades
¿Qué hacer ante amistades que no nos gustan para nuestro hijo?
Lo primero que debemos de hacer es no oponernos directamente a la amistad de nuestro hijo, debemos de buscar actividades que lo mantengan ocupado, de esta manera no tendrá tiempo de ver a su amigo. No debemos descartar que quizás hemos juzgado mal al amigo de nuestro hijo, invitémoslo a comer y démonos la oportunidad de conocerlo, quizás no sea como nosotros pensamos.
Ver también: 6 consejos para conocer a los amigos de tus hijos
Consejos rápidos para orientar a nuestros hijos sobre sus amistades
No hay mejor forma de orientar a nuestros hijos que hablando con ellos, podemos poner ejemplos indirectos sobre situaciones de amistades peligrosas en la adolescencia, en especial aquellas que hablen de drogas, alcoholismo y vandalismo, hagámosle preguntas, para saber cómo se siente al respecto, de esta manera sabremos cómo piensa y haría en esos casos. Procura invitar a sus amigos a la casa, de esta manera sabrás con quién se junta y cómo son sus amigos.
Recuerda que no debemos juzgar a las amistades de nuestro hijo adolescente, pero sí podemos orientar a nuestro hijo a buscar amistades que lo ayuden a ser mejor estudiante, persona y sobre todo que aprenda a distinguir a un verdadero amigo.