La herencia del príncipe Felipe, esposo de la reina Isabel II de Reino Unido, comenzó a ser un tema de interés luego de que se conociera la noticia de su muerte, a los 99 años, ocurrida el viernes pasado.
De acuerdo al medio Vanity Fair, se estima que ha muerto con una fortuna cercana a los $12 millones de euros (alrededor de $15 millones de dólares), muy alejada de los $25 millones de euros que le atribuían algunas fuentes.
Según lo que consignó ese medio, luego de que la familia del duque fue destronada y se exilió, Felipe no tenía patrimonio personal hasta que se casó con Isabel. Por eso, el monto que acumuló en su vida estaba lejos de acercarse al que podría ostentar la monarca.
Además del dinero que podía llegar a tener, Felipe era un amante del arte y a lo largo de toda su vida recibió pinturas de la Commonwealth, sobre todo obras ligadas al paisajismo y al arte figurativo. Todas entran dentro del patrimonio del príncipe consorte.
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Ahora bien, tanto la fortuna como los bienes y objetos materiales pasarán a manos de su esposa, ya que es una tradición real y se hace con el fin de evitar el pago de impuestos que generaría heredarle a algún otro miembro de la familia.
Felipe deja un legado de más de siete décadas de apariciones públicas que le llevaron a describirse a sí mismo como un modernizador de la monarquía británica, hasta su llegada a la Familia Real en 1947.
El funeral del príncipe se llevará a cabo en la Capilla de San Jorge, en Windsor, pero los arreglos para el funeral fueron revisados debido a la pandemia, informó el Colegio de Armas, en el que se agrega que no será un funeral de Estado y que no se instalará una capilla ardiente.
